Los ochenta bajo sospecha
reflexiones sobre la evolucion de la musica

Ultimamente hay cierta tendencia a recordar como gloriosos los años ochenta .Siempre pasa lo mismo, existe una especie de ciclo de 20-25 años en los que vuelve una segunda iteracion de las epocas pasadas, seguramente porque los jovenes que en los ochenta tenian de 20 a 30 años ahora rondan la cuarentena, y ya se sabe lo que pasa a estas edades.Exaltacion de la juventud, desempolve de vinilos, viajes al trastero en busca de esa fabulosa chupa rosa de cuero...

Y claro, como el tema es generacional, la ola remember atraviesa el planeta de cabo a rabo, recordando esteticas, musica, peliculas, series de television y un largo etcétera. El aspecto estetico no es algo que me disguste en demasía, fue una epoca de excesos y de sobresalir del resto a base de a-ver-quien-tiene-el-pelo-mas-cardado , y la laca en sprays iba abriendo su pequeño agujero en la capa de ozono.

Pero no me voy a extender en esto, que no es el tema que nos ocupa. La música.La musica de los ochenta se vuelve a recordar con nostalgia y lagrimas en los ojos, recordandola como algo excepcional.Pero los ochenta fueron el principio del fin.Y me explico.

El arte es arte, una forma de expresion que busca la belleza, la armonia, siendo esta su unica razon de ser.Pero a finales de los setenta y desde los ochenta, la musica sufrio uno de los peores ataques contra su esencia: La industria de la musica. Discos como galletas, producciones para masas, maquinas de hacer dinero, la rentabilidad sobre todas las cosas.Aberraciones musicales.La cancion del verano.La musica debe vender sobre todas las cosas.Listas de los mas vendidos (que no tiene nada que ver con la calidad de los temas que las forman)... y asi hasta conseguir que un disco tenga el mismo objetivo en el mercado que una lata de coca-cola : VENDERSE.Campañas publicitarias de discos a nivel internacional, grupos de fabrica (new kids on the block y todos los que les han seguido).Y lo peor de todo, la tirania que la industria ejerce sobre la musica, si no entras en su juego no tienes absolutamente nada que hacer.

Pero la esperanza esta en la red.El gigante tiene pies de barro, y sus pies se llaman internet, se llama P2P, se llamó napster....Tengo una fe absoluta en recuperar el terreno que perdimos en los ochenta sin darnos cuenta.En devolver el estado de arte a la musica, y mandar de una patada a los perros de la industria a realizar sus sinteticas obras en serie.

Que los musicos vivan de la musica porque se lo merezcan, no por ser el mejor producto.

Que la musica vuelva a ser musica.


escupido por elHijoDelFonk a eso de las 11:28 a. m.